En la Asociación Valle-Inclán tuvo lugar un acto-homenaje a María Luisa Suárez, primera abogada laboralista de nuestro país, con motivo de su última obra, aún inédita, ‘Ensayo sobre feminismo’. Un homenaje de la Asociación en una fecha cercana al 8 de marzo.

El libro de María Luisa, dedicado a sus padres, marido, hija y amigos, tiene un prólogo de Yenia Camacho, hija de Marcelino Camacho. En él María Luisa analiza el feminismo desde sus comienzos con la revolución feminista emprendida en el siglo XIX para lograr el derecho a la educación, cultura y con posterioridad el derecho al voto y a ser votada hasta la actualidad donde menciona lo mucho que queda por hacer a favor de la igualdad en muchos ámbitos.

Se va deteniendo en distintos momentos históricos: el día internacional de la mujer socialista en 1909, manifestaciones de mujeres por la paz en 1914-1918 contra la primera guerra mundial, el día internacional de la mujer trabajadora en 1975, en 2011 o la institución por la ONU del día de la mujer para la igualdad de género y empoderamiento de la mujer y un largo etcétera junto a la contribución de mujeres significativas que han ejercido diversas influencias como: Rosa de Luxemburgo, Indira Gandhi y otras.

Debido a su avanzada edad, 93 años, María Luisa Suárez no pudo acudir al acto, unos claveles rojos sobre la mesa la representaban. Fue Juan José del Águila, magistrado de lo social en Sevilla y Madrid y actualmente jubilado, quien trasladó a la audiencia un breve relato del recorrido profesional de María Luisa, coincidente con el suyo en el despacho laboralista de la calle de la Cruz durante los años de lucha antifranquista.

Habló de la actividad política e intenso trabajo que tenían por la conflictividad que había entonces en el mundo laboral y político, y cómo los despachos colectivos laboralistas fueron una de las experiencias más importantes y significativas de la oposición en el último tercio de la dictadura franquista.

Del Águila, vivió muy de cerca el asesinato de los abogados de Atocha el día 24 de enero de 1977, ya que pertenecía a uno de los frentes de la Agrupación de Abogados de Madrid, el de Barrios y Cívico, que se reunía en Atocha 49 y que acudieron ese día atendiendo a una cita equivocada en Atocha número 55. Juan José del Águila fue a solventar el error y por minutos no estuvo en el lugar de los terribles sucesos en el que murieron asesinados cinco abogados del Frente Profesional.

Explicó como había sido su vinculación con María Luisa. Sucedió que tras licenciarse en derecho cumplió un año de condena por el Tribunal de Orden Público (TOP) por propaganda ilegal. Durante ese año pasó por tres cárceles españolas, lo que se llamó “turismo penitenciario” y al salir de prisión en noviembre de 1969, se le abrió la puerta del despacho de María Luisa en la calle de la Cruz que le ofreció trabajo.

Ha sido autor del perfil de María Luisa en la entrada de esta en el diccionario de la Academia de la Historia. Aludió también a la importancia que tiene la reunir documentación que ambos han donado a la Fundación Primero de Mayo: “Demandas obreras y tribunales franquistas”, ya publicado, y expedientes del despacho de María Luisa sobre el movimiento obrero durante el franquismo. “A los documentalistas les queda mucho trabajo”, dijo.