Ha salido a la calle, en Madrid, la 52 Marea blanca y primera del año 2017
En esta ocasión, los ciudadanos y trabajadores de los hospitales han mostrado sus reivindicaciones respecto a la necesidad de mejora de la sanidad pública “ abrazando al Hospital Gregorio Marañón”.
La manifestación, se inició con una concentración delante de la puerta principal del hospital, para desde allí, tomar la calle Ibiza hasta llegar a Maiquez, y doblando en Doctor Castelo volver de nuevo a la calle Doctor Esquerdo hasta llegar al punto de salida. Un rodeo completo al hospital coreando los lemas ya habituales de las mareas “sanidad pública 100%”, “no a los recortes en Sanidad”.
Finalizó con la lectura de un manifiesto, en el que se explicitaba la carencia de camas y personal, que se ha hecho evidente con la demora de las cirugías al declararse la epidemia de gripe, y la escasa atención al reciente incremento que hubo de bronquiolitis en bebés.
Insistiendo una vez más en que en que se dote a la sanidad pública de todo lo necesario para una atención que sea satisfactoria y que no entren empresas que privaticen los servicios.
Se está olvidando que “no son las técnicas y la ciencia los que señalan el camino verdadero” sino que es preciso utilizar “criterios esencialmente políticos para tomar las decisiones: de sostenibilidad, equidad, justicia, emancipación, solidaridad, etcétera”.
La reflexión técnico científica requiere una deliberación pública y una visión de futuro, saber a dónde vamos. Por otro lado, los cambios políticos, culturales, profesionales, sociales han permitido que el conocimiento médico se haya privatizado frente a su propia naturaleza que es el bien común ya que el conocimiento médico es posible gracias a presupuestos públicos miles de médicos y pacientes que han contribuido a la descripción de síndromes y enfermedades, a la realización de ensayos clínicos y a la investigación básica. Investigación que ahora se privatiza mediante patentes.
Durante el año 2017 cada mes, la marea blanca se llevará a cabo abrazando a diferentes hospitales madrileños y desgranando todos aquellos aspectos de la medicina que requieran una atención pública y un debate político para mejor encaminar todas las decisiones.